-¡ALELIA DESPIERTA!
¡ALELIA! ¡ALELIA! ¡DESPIERTAAAAAAAAAA…!
Tienes que ir al
universidad, ya es bastante tarde, así que espabílate, te espero abajo en la
cocina-gritó su madre.
Alelia es una chica
morena con los ojos verdes, delgada y alta, tiene 19 años es divertida, amable
y cariñosa y fiel a sus amigos. Lo que no sabía es que su vida estaba a punto
de cambiar y no tendría mucho que esperar para que esto ocurriese.
Alelia bajo lo más
rápido que pudo a la cocina, desayuno muy rápido y se arreglo, cogió las llaves
del coche, este no era suyo, era de su madre y salió a toda prisa.
Cuando llego a la
universidad aparco el coche y se bajo, al bajarse del coche pudo vislumbrar que
su amigo Luker estaba cerca de ella y fue para allá saludarlo.
Como siempre Luker y
Alelia se saludaron y entraron por la puerta de la universidad, al llegar a
clase se fijaron en que no había nadie en el aula, así que decidieron volver a
los aparcamientos creyendo que entraban a segunda hora. Mientras andaban por el
pasillo de la universidad, ya llegando a la puerta de salida del edificio
encontraron a Hendier merodeando por allí.
-Hendier, ¿Qué haces por
aquí? – preguntó Alelia.
-Buscando a más gente
por este edificio, porque en los otros no hay nadie– respondió Hendier.
-Y, ¿has encontrado a
alguien?- preguntó Alelia.
-No, a nadie- negó
Hendier con la cabeza.
Mientras que los tres
entablaban una conversación de lo que creían que pasaba, hubo un ruido
atronador en el pasillo que venía detrás de sus espaldas. Se giraron para ver
que era y pudieron ver una sombra en la pared que les decía:
-Dadme el clorodado de
hierro, sé que lo tenéis - dijo la sombra
Ellos se preguntaron,
¿Qué es el clorodado de hierro?
O_O guau!! me encanto: corto e interesante..perfecto!! hmmm...que pasará?? que intriga
ResponderEliminarEsperaré más actualizaciones del blog y estaré el 21 besos Nando!!